Hay tardes de cielo añil en que nos acercamos a una de las más viejas parcelas del pago. Desde la bodega, el paseo sigue una línea de cipreses hasta la esquina de una senda. Ese ángulo da nombre a nuestra viña más excepcional.
El Picón es el gran símbolo y la realidad más profunda. La suma de enigmas en un fruto bello y puro. El vino del silencio y la dicha íntima, un gusto eterno donde culminan generaciones, esfuerzos y el favor de la naturaleza.
ProcedenciaUva procedente de la parcela El Picón, una de las más antiguas de Pago de los Capellanes en Pedrosa de Duero.
Viticultura1,6 hectáreas en suelo franco-arcilloso con gravas en superficie. La fertiilidad es muy pobre y el rendimiento de la viña, bajísimo.
Crianza22 meses en barricas de madera roble francés de 225 litros, de grano extra-fino y 60 meses de secado.